El verso: la métrica y la rima

¿Te has planteado alguna vez cómo hacer la métrica y rima de un poema? Es una labor que puede parecer compleja, pero si conoces las herramientas básicas de la poesía, no te resultará complicado lograr una composición sencilla que cumpla con las reglas.

Un poema es una composición formada por diversos elementos, entre los que destacan los versos, que suelen ser de diferentes medidas, y las estrofas, que están formadas por grupos de versos. Ambos se unifican en lo que se llama la métrica, que, junto con la rima, provocan que la composición tenga ritmo y, al leerla o recitarla, muestre cierta musicalidad.

La métrica es la medida de los versos. Al saber cómo estructurarlos, es más fácil combinarlos para obtener el resultado deseado. Así pues, hemos de hacer un cómputo silábico, es decir, medir el número de sílabas que tiene un verso para obtener el ritmo que buscamos – Fran/cis/co/ de/ Que/ve/do.

Considera aquí diversos elementos básicos, como son el verso, que son las líneas que componen un poema. También la estrofa, que es el conjunto de versos unidos por una misma rima y medida, a no ser que sean versos libres. Y, definitivamente, el propio poema, que es el conjunto o estructura global de versos y estrofas – Va/mos/ con/ e/llo/ – jo/ven/ ple/be/yo.

Según la RAE, la rima es una entidad de sonidos consonánticos y vocálicos a partir de la última vocal acentuada en dos o más versos. O sea, la repetición secuencial de fonemas en una sílaba tónica que finaliza cada verso, que será lo que provoque la rima y el ritmo del poema – Va/mos/ con/ E/LLO/ – jo/ven/ ple/bE/YO.

La rima puede ser asonante y consonante. En el primer caso, la rima se produce sólo con la última vocal del verso, en el segundo, con la última consonante.

Por último, debes saber de qué tipos de métrica dispones y cómo se puede medir en un poema:

  • Versos de arte mayor: se componen de versos de al menos nueve sílabas, llamados eneasílabos. De ahí en adelante encontramos otros como el decasílabo, el endecasílabo, etc., según el número de sílabas.
  • Versos de arte menor: poseen ocho o menos sílabas. Los hay desde los más sencillos, que son los versos con solo dos sílabas o bisílabos, hasta lo que incorporan las ocho, los octosílabos.

Finalmente, es importante saber cómo medir la métrica del poema, para lo que se tendrá en cuenta el acento de la última palabra de cada verso y las diversas licencias métricas que se puede tomar el poeta para ajustar la métrica, que son las siguientes:

  • Sinalefa: si una palabra acaba en vocal y la siguiente comienza en vocal, se unen formando una sola sílaba.
  • Diéresis: separación entre dos vocales que irían juntas por diptongo, pero son separadas por el autor para mantener la métrica.
  • Sinéresis: lo contario al caso anterior, pues dos vocales juntas dejan de ser diptongo y se separan pese a ir unidas.
  • Hiato: al contrario de la sinalefa, la última sílaba acabada en vocal y la primera de la siguiente palabra no se unen.

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