Desarrollo de la idea.
Llegados a esta fase será cuando empecemos a materializar la construcción del objeto tecnológico. Si todas las fases anteriores han sido desarrolladas correctamente y hemos realizado un buen diseño y planificación, nos resultará relativamente fácil ir siguiendo el procedimiento establecido para ir dando forma material a nuestro producto.
- Marcando los elementos constructivos. Lo primero que tendremos que hacer es tomar el material que vamos a utilizar para construir nuestro objeto y marcar sobre él las distintas partes que compondrán el resultado final. Se trata por tanto de trasladar los planos de despiece sobre el material, teniendo en cuenta que si bien en la documentación de planificación que hemos desarrollado estos planos podían estar representados a escala, ahora deberán realizarse a escala natural, es decir a su tamaño real.
La disposición de las distintas piezas que estamos marcando sobre el material deberán estar dispuestas de tal modo que se aproveche del mejor modo posible el espacio y que, por tanto, la cantidad de material requerido no se vea incrementada innecesariamente. No tener en cuenta esta precaución, nos llevaría a gastar más material innecesariamente y como consecuencia de ello a incrementar el coste del producto final sin justificación alguna.
- Cortado y ajuste. Una vez marcadas todas las piezas necesarias, procederemos a ir cortándolas, usando las máquinas y herramientas de corte que mejor se ajusten a la singularidad del material y cortes que tenemos que propiciar. Tras el corte de las piezas y como es previsible que no sean todo lo precisas que deseásemos inicialmente, haremos uso de lija y/o limas para hacer una aproximación más exacta.
El uso de estas máquinas y herramientas conllevan el necesario cumplimiento de las normas de uso y conservación de las mismas. No podemos olvidar que determinados trabajos, incluso a veces los más insospechados, entrañan un riesgo potencial de sufrir un accidente que puede tener consecuencias graves. Es por tanto de vital importancia el conocimiento y cumplimiento de estas normas así como el seguir escrupulosamente las indicaciones del profesor al respecto y el hacer uso de las medidas de protección y seguridad tanto individuales como grupales que puedan ser precisas.
- Ensamblaje. Llega ahora el momento de de ir montando las distintas partes que componen nuestro objeto para obtener la configuración final que vamos buscando. Aquí valoraremos si la construcción final va a ser fija, manteniendo una configuración estable o es previsible que deba ser desmontado, en base a ello seleccionaremos los materiales de unión más apropiados.
De entre los elementos de unión que podemos utilizar, podemos hacer una distinción de dos categorías: los fijos y los desmontables. La elección de unos u otros va a depender fundamentalmente de la funcionalidad del objeto que estamos construyendo y los materiales de los que estará constituido. Para el caso concreto de nuestro calendario 3D parece que los fijos van a ser más adecuados.
- Evaluación. A medida que vamos construyendo nuestro objeto, y de forma especial una vez construido, iremos valorando si el montaje se ajusta a lo previsto y si no hay ninguna variación que comprometa su funcionalidad, si la hubiese, habría que hacer un replanteamiento del diseño y un reajuste del proceso constructivo.